¿Qué medidas podemos tomar para eliminar la infección por hongos y bacterias en la piel?
- Secar prolijamente después del baño las zonas de pliegues como axilas, ingles y los espacios entre cada dedo de los pies.
- Evitar el uso de calzado que contenga goma en la planta. Resulta mucho más barato comprar tres pares de zapatos buenos, de cuero y con suela por debajo -no goma-, que el tratamiento de una infección por hongos de las uñas de los pies.
Respecto a las bacterias, nuestra superficie cutánea se encuentra colonizada por un gran número de ellas que constituyen la denominada flora normal de la piel. Dichos microorganismos nos protegen de infecciones más graves, por lo que pretender eliminarlos en base a productos antisépticos es absurdo (además de que tras de su empleo, inevitablemente, la piel rápidamente recuperará su flora normal habitual).
Si tenemos hongos, debemos acudir a un especialista para recibir el tratamiento adecuado. En el pie de atleta puede bastar con un tratamiento tópico en base a una crema, pero en una infección por hongos de una uña el tratamiento de elección es oral y puede extenderse durante al menos tres meses. En pacientes adultos o muy medicados puede optarse por un tratamiento en base a una laca antimicótica.
Los pacientes con factores predisponentes como diabetes o problemas circulatorios de miembros inferiores tendrán mayores probabilidades de que la micosis tienda a reaparecer. Un riesgo potencial de una micosis cutánea es que, por las fisuras que produce, especialmente entre los dedos de los pies, aparezca una sobre-infección por bacterias, especialmente estafilocócica, lo que originará una celulitis aguda o una erisipela, cuadros de mayor gravedad que la infección por hongos.